Viaja con la mente abierta. Aprecia tu viaje como una forma de autoeducación. Aquí es fundamental la actitud de humildad ante los demás, siempre. Nos ha tocado vivir en carne propia las groserías por parte de viajeros a personas de distintas culturas sólo porque sus cabecitas no logran entender que el mundo es mucho más diverso. El peor error al viajar a otras culturas es querer comparar el cómo vives tú y cómo es tu realidad contra lo que estas viendo en ese nuevo destino. No puedes ir a la India y estarte quejando del tráfico, de la comida, de sus hábitos y costumbres aunque sean totalmente opuestos a los tuyos. Si vas a viajar viaja con actitud humilde y de respeto a lo que es diferente a tu realidad.
Valora la diversidad. Quitarse las telarañas mentales y los prejuicios. No todos tienen porque pensar y vivir como tú lo haces, y debes aceptar y valorar eso. Es lo que enriquece la visión del mundo.
Respeta las costumbres locales. Recuerda que eres tú el ajeno en el lugar que visitas, respeta más allá de tus propias creencias. No se trata de si te gusta o no, de si estás de acuerdo o no, es tu obligación respetar.
Trata de entender las costumbres, normas y tradiciones locales, teniendo en cuenta la historia y cultura del destino, así como sus condiciones políticas, sociales y geográficas. Para todo hay una razón cultural e histórica, si estudias un poco el destino a visitar te será más fácil entenderlo.
Establece relaciones cordiales con la población local, con los vendedores callejeros, con tus guías y evita comportamientos ofensivos. En la cultura de algunos países asiáticos no hay proxemia corporal - o muy poca - y es común que las personas se acerquen demasaido a ti (sobre todo los vendedores). Si no tienes claro que así es su cultura, te la pasarás haciendo corajes y hasta insultando a la gente. Hay que estar bien informados antes de viajar. Para eso puedes confiar plenamente en Nautika, Los Expertos en Viajes.
Aprende algunas palabras en el idioma local o autóctono para poder relacionarte con la comunidad local. Esto le encanta a las personas del país que visitas, ven un esfuerzo de tu parte en aprender un poco de ellos y de su cultura.
En resumen, respeta, respeta, respeta. Si no eres capaz de respetar ideas disntintas a la tuya, te tenemos un consejo: MEJOR NO VIAJES.
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